Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Hace mucho tiempo, los dragones y los unicornios entregaron su magia a dos héroes que los salvaron y crearon el reino de Artemisa. Desde entonces, sus habitant
Hace mucho tiempo, los dragones y los unicornios entregaron su magia a dos héroes que los salvaron y crearon el reino de Artemisa. Desde entonces, sus habitantes nacen con cuernos en la frente o alas en la espalda. Puede parecer una pasada, pero Willow solo quiere ser normal. No quiere hacer su viaje por el bosque Oscuro, ni encontrarse con ningún unicornio, tan solo jugar con su amiga Dawn y su hermano Rigel. En un reino mágico con arañas rosas que mascan chicle, sirenas mentirosas, lagos de zumo de frutos rojo o mariquitas que hacen trenzas Willow solo quiere ver el mundo de los humanos.