Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Cuando Elisabeth de Wittelsbach, princesa de Baviera, la mítica Sissi, nació el 24 de diciembre de 1837, una serie de malos augurios anunciaron lo que más ta
Cuando Elisabeth de Wittelsbach, princesa de Baviera, la mítica Sissi, nació el 24 de diciembre de 1837, una serie de malos augurios anunciaron lo que más tarde se confirmaría: que aquella chiquilla tendría un futuro privilegiado pero repleto de tragedias. La suya sería una vida tan dramática como malentendida, sepultada entre fábulas y mentiras, a la que un anarquista daría fin en uno de los asesinatos más famosos de la historia.Sissi se convirtió con el tiempo en un icono, pero su verdadera personalidad no siempre se ha contado bien: ni amó a su esposo, ni se instaló en Madeira por un problema de pulmones, ni acabó yéndose a destinos lejanos para huir de la asfixiante corte de Viena. Durante años se ha perpetuado una visión fantasiosa que negaba a la auténtica Elisabeth, una mujer a contracorriente, rebelde, fascinante y compleja. Muy avanzada a su época, se enfrentó a su propio marido y su vida sexual fue mucho más pasional e intensa de lo que se creía. Sufrió con desgarro y padeció agudos problemas de salud, con una anorexia que nunca superaría y gravísimas depresiones.Durante décadas, Sissi ha vivido entre mitos, pero ha llegado la hora de desvelar sus más profundos secretos.Esta es la verdadera historia de Elisabeth, la mujer detrás de la leyenda.