Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Las irreverentes lecciones de Shin chan para desafiar la monotonía y encontrar diversión en lo cotidiano. Nos vendieron que ser adultos significaba tenerlo todo bajo control, pero la realidad es otra: la vida es un... Seguir leyendo
Las irreverentes lecciones de Shin chan para desafiar la monotonía y encontrar diversión en lo cotidiano. Nos vendieron que ser adultos significaba tenerlo todo bajo control, pero la realidad es otra: la vida es un caos y vivimos atrapados en la rutina, el estrés y las expectativas ajenas. Vamos, que podría decirse que lo único sensato que nos queda es aprender a reírnos de nosotros mismos. En este libro, Shin chan nos invita a soltar el peso de la responsabilidad, a no aplazar nuestra búsqueda de la felicidad y a no olvidar que, por mucho que nos preocupemos, el mundo seguirá girando sin nosotros. Con su humor descarado y su honestidad sin filtros, nos recuerda que ser adultos no significa renunciar a la diversión ni a nuestra esencia. Quizá no se trata de ser perfectos, sino de aprender a vivir con más ligereza, como ese niño de cinco años que nunca pidió permiso para ser feliz. ¡Las valiosas lecciones de vida que se esconden detrás de las bromas de Shin chan!
El contacto de seguridad todavía no está disponible. Si necesitan esta información solicítenla mediante este enlace
Este artículo no tiene advertencias de seguridad. Si tienen alguna duda al respecto consulten al contacto de seguridad.