En los ·ltimos a±os la extrema derecha ha hecho todo lo posible por acelerar el calentamiento: un presidente estadounidense que cree que es un enga±o ha eliminado los lÝmites a la producci¾n de combustibles f¾siles. El presidente brasile±o ha abierto el Amazonas y lo ha visto arder. En Europa, los partidos que niegan la crisis e insisten en la mßxima combusti¾n han irrumpido en los gobiernos, de Suecia a Espa±a. Al borde del colapso, han surgido las fuerzas que mßs agresivamente promueven el business as usual, siempre en defensa del privilegio blanco, contra supuestas amenazas de otros no blancos. +De d¾nde vienen?  El primer estudio sobre la extrema derecha en la crisis climßtica, µPiel blanca, combustible negroã presenta un barrido revelador de una nueva constelaci¾n polÝtica, y revela sus profundas raÝces hist¾ricas.  Las tecnologÝas que utilizan combustibles f¾siles nacieron impregnadas de racismo. Nadie las am¾ con mßs pasi¾n que los fascistas clßsicos. Ahora han surgido fuerzas de derechas, algunas de las cuales afirman tener la soluci¾n: cerrar las fronteras para salvar a la naci¾n