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Aymar, obsesionado con su deseo de reconquistar las tierras de sus ancestros, consigue que el señor Gondran lo invite a visitarlo, a condición de que no se ac
Aymar, obsesionado con su deseo de reconquistar las tierras de sus ancestros, consigue que el señor Gondran lo invite a visitarlo, a condición de que no se acerque al castillo del señor Guibert, actual dueño de las tierras de Bois-Mauri. El deseo de Aymar es fervoroso y se cuela en el castillo. Ahuyentado y perseguido por los guardias del señor Guibert, cae por un barranco y se hiere en una pierna. Por suerte, un viejo amigo acude a su rescate, justo antes de que aparezca el hombre del hacha para matarlo