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Doris, de 96 años, ha tenido la misma agenda desde 1928. Ese librito rojo, que su padre le regaló de niña, contiene las personas a las que ha conocido y quer
Doris, de 96 años, ha tenido la misma agenda desde 1928. Ese librito rojo, que su padre le regaló de niña, contiene las personas a las que ha conocido y querido a lo largo de su vida. Ahora Doris vive sola en un apartamento del centro de Estocolmo y muchos de los nombres de su agenda aparecen tachados, y las únicas visitas que recibe son las del servicio de atención a la tercera edad. Su principal fuente de alegría son las llamadas vía Skype de su único familiar, su sobrina nieta Jenny, que vive en California, al otro lado del Atlántico. Un día Doris empieza a escribir la historia de cómo conoció a las personas que dieron forma a su vida, para que Jenny pueda compartir su posesión más valiosa: los recuerdos de su azarosa e increíble vida, primero como doncella en Estocolmo y como modelo de alta costura después en París.