Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
El autor presenta dos afirmaciones congruentes cargadas, ambas, de doctrina historiográfica y jurídica: De una parte, la historicidad de la Nación española
El autor presenta dos afirmaciones congruentes cargadas, ambas, de doctrina historiográfica y jurídica: De una parte, la historicidad de la Nación española, en siete claves: Rechazo del esencialismo o providencialismo; Nación creada en la larga cocedura de una historia contrastada, Ni extemporánea ni contrahistórica, No es una nación fallida, sino potente foco cultural interior y civilizador de medio mundo; que no es el indefinible concepto de Nación de naciones, en tanto que ninguana región tiene cultura e historia ajena a la común, con espesor y densidad propias de nación; que es una nación diversa en tanto que ningún Estado histórico puede ser uniforme en tanto que comportaría imposición neosecesionista y, por último: que el Patriotismo nacional, culto y lúcido, no ha necesitado jamás de nacionalistas pero sí de patriotas. En segundo término, refuta del nacionalismo en el mismo número de puntos: Que los vascones no fueron el pueblo originario del País Vasco pues llegaron cuando ya estaba habitado por diversas tribus; que no existe traza de soberanía originaria en las tribus vascas que surgen bajo sobe