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En mayo de 1945 la segunda guerra mundial llega a su fin. Pero no es el final en Yugoslavia, donde los partisanos de Tito llevan a cabo una serie de espantosas
En mayo de 1945 la segunda guerra mundial llega a su fin. Pero no es el final en Yugoslavia, donde los partisanos de Tito llevan a cabo una serie de espantosas matanzas durante las semanas siguientes, en lo que se conocería colectivamente como la masacre de Bleiburg. Durante más de cuarenta años el crimen permaneció oculto, hasta que en 1989 el historiador esloveno Roman Leljak comenzó una búsqueda de la verdad hasta llegar al lugar que simboliza todo el horror de lo sucedido, la mina de Huda Jama. Pese a que Leljak publicó su libro ese mismo año, Huda Jama no se abriría hasta 20 años después, revelando miles de cadáveres que en muchos casos fueron enterrados vivos.