Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Durante años, en la recóndita colonia menonita de Molotschna, decenas de mujeres han sido sistemáticamente drogadas y violadas mientras dormían. Despertaban doloridas y sangrando. La comunidad se empeñaba en mantener que todo era producto de... Seguir leyendo
Durante años, en la recóndita colonia menonita de Molotschna, decenas de mujeres han sido sistemáticamente drogadas y violadas mientras dormían. Despertaban doloridas y sangrando. La comunidad se empeñaba en mantener que todo era producto de su absurda imaginación, o quizá del demonio, que las castigaba por sus pecados. Los violadores, sin embargo, eran hombres de la propia colonia: tíos, hermanos o vecinos que finalmente acabaron en prisión pero que en apenas dos días serán liberados bajo fianza y regresarán a casa. Ocho de esas mujeres que padecieron abusos y violaciones están a punto de reunirse en secreto para tomar una decisión que determinará su futuro. ¿Qué deben hacer? ¿Perdonarlos, como pide el Pastor? ¿Responder a la violencia con más violencia? ¿O marcharse para siempre?
El contacto de seguridad todavía no está disponible. Si necesitan esta información solicítenla mediante este enlace
Este artículo no tiene advertencias de seguridad. Si tienen alguna duda al respecto consulten al contacto de seguridad.