Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
En Barrios, bloques y basura", Julia Wertz nos lleva a la parte trasera de esa Nueva York que crees que conoces. No es la Nueva York turística la Estatua de
En Barrios, bloques y basura", Julia Wertz nos lleva a la parte trasera de esa Nueva York que crees que conoces. No es la Nueva York turística la Estatua de la Libertad hace apenas una breve aparición y el Empire State Building no sale en absoluto , sino sus entrañas, los lugares más secretos de esta ciudad que, a día de hoy, sigue sin dormir. A través de magníficos y divertidos dibujos y cómics, Wertz nos descubre paisajes urbanos en los que podemos encontrar «el antes y el después» de muchos de sus rincones más increíbles y las historias más disparatadas, como la leyenda de Kim"s Video, el peliagudo negocio de Ray"s Pizza, la basura vintage y los huesos de caballo que ensucian la costa de Bottle Beach en Brooklyn, el cementerio de máquinas de pinball en el fondo del Hudson, el astillero abandonado de Staten Island o la espeluznante biografía de Madame Restell, la insaciable abortera de la Quinta Avenida. De la mano de esta neoyorquina y neoyorsófila, tan buena contadora de historias como dibujante, y con un envidiable sentido del humor, recorreremos bares, restaurantes y puestos de comida ambulante, sabremos de libreros y de basureros, y entraremos en apartamentos minúsculos o de un lujo tan desorbitado como sus precios.