Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Un libro que reúne dos grandes pasiones: el cine y la historia, desde el punto de vista de quien conoce, ama y respeta ambos campos, sin olvidar en ningún mom
Un libro que reúne dos grandes pasiones: el cine y la historia, desde el punto de vista de quien conoce, ama y respeta ambos campos, sin olvidar en ningún momento que el cine, no es la realidad, y de que se trata de un arte.En un emocionante y ameno recorrido por diversos acontecimientos históricos el lector que se sumerja en estas páginas podrá ver cómo se desvelan muchas ideas falsas, que se tienen por verdaderas gracias al cine.El autor le enseñará la manera en que combatía una falange macedónica o una legión del imperio romano; las posibilidades de realizar una eficiente carga de caballería; la forma en que se enfrentaban a muerte los campeones de la Edad del Bronce; lo hábiles que eran los legionarios romanos con un gladius hispaniensis en sus manos, o lo chapuceros que eran los ejércitos masivos que formaban los persas, a falta de un liderazgo competente y tropas de calidad. Siempre apoyado en conocidas películas que le hicieron emocionarse en su butaca.